Tres preguntas que los adventistas no podemos responder, objetiva y satisfactoriamente, relacionadas con la profecía de Daniel 8. Parte I.

| Frank Claros

El principal propósito de este artículo, y los subsiguientes, es señalar puntualmente las inconsistencias y contradicciones de nuestra tradicional interpretación de la profecía de las 2,300 tardes y mañanas. Son preguntas que la membresía puede hacerle a los pastores de distrito, a los dirigentes de las asociaciones; y en última instancia a los calificados teólogos del Instituto de investigación bíblica, quienes difícilmente podrán darnos una respuesta objetiva y satisfactoria. El segundo motivo, es facilitar que se les caiga de los ojos a nuestros dirigentes, el velo que ha nublado el entendimiento profético, al haber aceptado tradiciones y creencias de las profecías, basadas en suposiciones y deducciones que formularon nuestros sinceros pioneros, sin ningún fundamento bíblico ni histórico; por el nivel de ignorancia que prevalecía en ese entonces. El tercer propósito es motivar una revisión puntual de las creencias que en este artículo y los siguientes se cuestionarán, en aras de buscar y estar de parte de la verdad. Es oportuno señalar que parte del material que vamos a considerar en este artículo, ya lo compartimos en otros artículos previos en forma general, pero que en esta ocasión cuestionará y desafiará a dar una respuesta satisfactoria a cada pregunta. La primera pregunta es: ¿Qué es el continuo en Daniel 8?, o en otras palabras: ¿En qué consiste el continuo? Comenzamos con esta pregunta, porque es la pregunta medular que señala en Daniel 8:11, el inicio de la profanación del santuario con la suspensión del continuo, y que en los versos 13 y 14, se inquiere acerca del tiempo de la duración de dicha suspensión, que otro ser celestial responde que sería por 2,300 tardes y mañanas, y que nosotros interpretamos que son 2,300 años que terminaron en 1,844. La anterior interpretación bíblica nos obliga a preguntarnos: ¿En qué consistió el continuo?, y ¿Cómo pudo ser quitado o suspendido por un período de 2,300 años, después del cual es restaurado como el primer paso de la reivindicación total del santuario? Antes de tratar de contestar la pregunta anterior, debemos aclarar que «continuo» se deriva de la palabra hebrea «tamid». El Comentario bíblico adventista, tomo 4, págs. 868-869, ayuda a entender el significado de la palabra continuo en las Escrituras, y muy particularmente en Daniel 8:11, al registrar: «Continuo sacrificio. Heb. «tamid», palabra que aparece 103 veces en el Antiguo Testamento y que se usa como adverbio y como adjetivo». Como adverbio de tiempo significa continuamente o continuo, y «se aplica a varios conceptos tales … la lámpara que debía arder continuamente, Éxodo 27:20; el fuego que debía arder siempre sobre el altar, Levítico 6: 13; las ofrendas encendidas que debían ofrecerse diariamente, Números 28: 3-6, etc., etc. En el capítulo 8:11 «tamid» se usa como adjetivo sustantivado, porque no hay otro sustantivo, por lo que, invariablemente, se refiere al ritual diario del sacrificio matutino y vespertino. En el Talmud, cuando «tamid» se usa en forma independiente (sustantivo) como aquí, la palabra se refiere uniformemente al sacrificio diario». El Diccionario Bíblico Adventista, en la pág. 246, confirma las anteriores declaraciones, al registrar: «En hebreo tardío, «tamid» es la expresión técnica para la ofrenda diaria completa que se presentaba de mañana y tarde … En Daniel 8:11-14, el poder simbolizado por el cuerno pequeño ASOLA EL SANTUARIO E INTERRUMPE SUS SERVICIOS RITUALES, pero después de un período de 2,300 días el santuario sería purificado o vindicado», y en consecuencia, se restablecerían los servicios rituales del santuario que habían sido suspendidos, como el continuo. No obstante las honestas y categóricas afirmaciones de las calificadas fuentes anteriormente citadas, nuestros teólogos las han ignorado deliberadamente, porque no se acomodan a nuestra tradicional interpretación de Daniel 8, que hemos sostenido por aproximadamente 170 años. El problema de rechazar las anteriores explicaciones bíblicas de lo que es el continuo, es que genera un vacío interpretativo del significado de ese término ,que no hemos podido llenar en toda la historia de nuestra iglesia, por más que se ha intentado. Para poder entender mejor lo anterior, debemos mencionar que para Guillermo Miller, el continuo representaba a la Roma pagana, que debió ser quitada para dar lugar a la roma papal, interpretación que Urías Smith adoptó, y que nuestra iglesia aceptó y sostuvo durante los siguientes 50 años después de 1,844 (Comentario bíblico adventista, tomo 4, págs. 66-68). A finales del siglo XIX, surgió una nueva corriente de pensamiento dentro de la iglesia, relacionada con el significado del continuo, que proponía que el continuo que había sido quitado, era el ministerio sacerdotal de Cristo en el santuario celestial, y sustituido por servicios humanos instituidos por el papa. Esa interpretación dio lugar a una disensión entre los dirigentes de la iglesia de ese entonces, que defendían «la vieja interpretación» de Smith, y los que aprobaban el «concepto nuevo». En esa pugna, ambos bandos se avocaron a la Hna. White para que definiera el asunto; encontrándose que ella los reprendió por ocuparse en discutir COSAS DE POCA IMPORTANCIA, agregando que DIOS NO LE HABÍA DADO NINGUNA INSTRUCCIÓN SOBRE ESE ASUNTO. No obstante lo declarado por la Hna. White, a comienzo del siglo XX (1,910), nuestros teólogos siguen predicando en los púlpitos y escribiendo en nuestros libros, que la suspensión del continuo consistió en la pretendida sustitución del ministerio sacerdotal del Señor en el santuario celestial, por la usurpación del cuerno pequeño o el papado, de ser el representante y mediador entre Dios y el hombre. La anterior interpretación presenta los siguientes inconvenientes temporales y rituales: 1 – Que si el papado, que quitó el continuo y usurpó la función sumo sacerdotal del Señor, representa al cuerno pequeño de Daniel 8: ¿Cómo pudo quitar el continuo en el año 457 a. C., durante el imperio persa, ochocientos años antes de su surgimiento como institución religiosa? 2 – El papado, que mantuvo suspendido el continuo por 2,300 años, que dio lugar a la supuesta usurpación religiosa que terminó en 1,844, ¿Porqué continuó con la pretensión de seguir siendo el mediador entre Dios y el hombre después de 1,844 cuando el continuo ya había sido restablecido como un primer paso en la vindicación total del santuario? Para ir terminando, es importante destacar una declaración del Comentario bíblico adventista, en el tomo IV, pág. 869; donde encontramos que nuestra iglesia, aún no tiene una posición oficial de lo que significa el continuo de Daniel 8, al registrar lo siguiente: «Quizás este sea uno de los pasajes de las Escrituras, respecto al cual, debemos esperar un día mejor para tener una respuesta definitiva». Después de leer la anterior declaración, debemos preguntarnos: ¿Cómo pretendemos entender y explicar la profecía de Daniel 8, si no podemos explicar en que consistió la suspensión y la restauración del continuo, después de 2,300 tardes y mañanas, eventos medulares en la revelación profética de Daniel 8? Por otro lado, ¿Cómo podemos afirmar que el entender y DEFINIR EN QUE CONSISTE EL CONTINUO ES ASUNTO DE POCA IMPORTANCIA, cuando los otros elementos mencionados en la profecía, giran alrededor de la suspensión del continuo, que fue el primer paso en la profanación del santuario mencionado en Daniel 8:11, y la restitución del mismo, que también debió ser el primer paso en la vindicación del mismo? Si hasta el momento no tenemos una interpretación y explicación oficial de lo que constituyó el continuo, toda nuestra interpretación de la profecía de Daniel 8, pierde credibilidad, y requiere una revisión para que tenga sentido y fundamento apoyado por las Escrituras y la historia; sino, no deja de ser una colección de suposiciones y deducciones bien intencionadas, pero carentes de coherencia, y divorciadas de lo revelado en el libro de Daniel. Bendiciones

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *